Rosalía Mera ha fallecido en el Hospital de San Rafael en A coruña; a donde fue trasladada desde Menorca, donde estaba pasando unos días de vacaciones que acabaron con este fatal desenlace.
No pudo superar una parada cardiorespiratoria derivada de un infarto cerebral.
Hija de una familia muy humilde de Monte Alto, a los 11 años dejó sus estudios para hacerse costurera. Comenzó diseñanado ropa de trabajo, en casa; junto al que entonces era su marido: Amancio Ortega. Juntos lograron hacerse un hueco entre las tiendas de moda de A Coruña con su Zara; que vino a sustituir a La Maja en el centro de A Coruña. La marca, en los 80, dio el salto nacional; siendo muy bien recibida en las grandes ciudades por su innovadora apuesta por la ropa de consumo.
Desde entonces, asesorados en todo momento por los mejores profesionales, construyeron la multinacional INDITEX. Pero a Raosalía esto no le llenó.
El nacimiento de Marcos marcó su vida: «Tienes un hijo sano y de repente otro que no lo es, que requiere toda tu atención y que no ha tenido, ni siquiera, la posibilidad de haber tenido un accidente o algún percance al que poder echarle la culpa.»
Rosalía, además, no era de echar culpas. No había ayuda ni respuestas a las preguntas; tocaba actuar.
Invirtió parte de ese patrimonio en obras sociales y en investigación de enfermedades consideradas «raras» a través de, entre otras, la Fundación PAIDEIA. También destacó como incubadora de muchas empresas de alta tecnología con sede en A Coruña.
No casa con la etiqueta de ‘rica’ pero lo era. Mujer menuda, con una mirada viva y expresiva que ahora se ha perdido.
Será enterrada en el cementerio de Liáns mañana sábado a las 11:00 y allí descansará para siempre. Allí y en la memoria de todos sus vecinos a los quería y de los que se consideraba querida como una más.